Cinco personas han sido arrestadas en relación con la muerte de Matthew Perry, conocido por su papel en la serie “Friends”, según anunciaron las autoridades federales. Perry fue encontrado sin vida en su hogar en Los Ángeles el pasado octubre, y una autopsia reveló que la causa de su muerte fue una sobredosis de ketamina, una droga que estaba utilizando como parte de una terapia supervisada.
Entre los detenidos se encuentra Jasveen Sangha, apodada “la reina de la ketamina”, junto con dos médicos, Salvador Plasencia y Mark Chavez. Los acusados enfrentan cargos graves, incluidos conspiración para distribuir ketamina y distribución de la droga con un resultado fatal. Las investigaciones revelaron que Perry adquirió una gran cantidad de ketamina a través de estos individuos, quienes utilizaban lenguaje codificado para sus transacciones.
El fiscal Martin Estrada destacó en una conferencia de prensa que los acusados veían a Perry como una fuente de ingresos, sin preocuparse por su bienestar. La investigación, aún en curso, ha sacado a la luz un verdadero “emporio de venta de drogas” gestionado por los detenidos, quienes cobraban precios exorbitantes por la ketamina, aprovechándose de la adicción y la vulnerabilidad del actor.
La tragedia de Matthew Perry pone de relieve los peligros de la distribución ilícita de medicamentos, incluso bajo la apariencia de tratamientos médicos. Las autoridades siguen investigando para asegurar que todos los responsables rindan cuentas, mientras la comunidad de Hollywood lamenta la pérdida de uno de sus actores más queridos.