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Netflix ha lanzado su más reciente producción titulada “Griselda”, protagonizada por grandes nombres como Sofía Vergara, Karol G, y Vanessa Ferlito. La serie, ambientada en los años 70 y 80 en Miami, sigue de cerca la historia de Griselda Blanco, conocida como “la viuda negra”, y su ascenso en el mundo del narcotráfico. Junto a personajes clave como Jorge “Rivi” Ayala Rivera y Darío Sepúlveda, “Griselda” no solo explora su imperio sino también las intensas rivalidades que marcaban su camino, incluyendo la figura de Luis Fernando Arcila Mejía, alias Papo Mejía.

¿Quién era Papo Mejía en la realidad?

En la vida real, Luis Fernando Arcila Mejía, mejor conocido como Papo Mejía, era un prominente proveedor en el narcotráfico de Miami, muy ligado a Carlos Ledher y el Cartel de Medellín. Originario de Barranquilla y más tarde establecido en Florida, Mejía se encontró en una lucha constante con Griselda Blanco por el control de las calles de Miami. Esta disputa llegó a extremos personales y violentos, incluyendo el asesinato del padre de Mejía por órdenes de Blanco, según reportes.

Contrario a lo que la serie puede sugerir, la realidad de Mejía post-prisión es difusa y contradictoria. Capturado y condenado a 30 años, fue liberado en el 2000, y desde entonces, su destino ha sido objeto de especulaciones, con algunos medios afirmando que murió poco después en un accidente de auto, mientras otros sostienen que podría estar vivo en Colombia.

Papo Mejía en la serie de Netflix

En “Griselda”, interpretado por Maximiliano Hernández, Papo Mejía es presentado como el adversario de la protagonista desde el inicio, bloqueando sus intentos de establecerse en el mercado de la cocaína en Florida. La serie dramatiza su rivalidad con escenas de violencia y confrontaciones que, aunque basadas en hechos reales, son adaptadas para la narrativa televisiva. Finalmente, su personaje encuentra un dramático final a manos de uno de los sicarios de Blanco, resaltando la brutalidad y la tragedia que envolvía sus vidas.

La historia de Papo Mejía, tanto en la realidad como en la ficción de Netflix, refleja las complejidades y los peligros del mundo del narcotráfico en aquellos años, marcados por la ambición, la traición y una violencia desmedida. La serie “Griselda” no solo revive la leyenda de la “viuda negra” sino que también nos introduce a figuras menos conocidas como Mejía, cuyas vidas se entrelazaron de forma ineludible con la de Griselda Blanco en el oscuro tapiz del crimen organizado.

*Con información de El Comercio