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Un inquietante hallazgo ha generado gran preocupación en la comunidad científica internacional: la presencia de una superbacteria altamente resistente a los antibióticos en la Estación Espacial Internacional (EEI).

Se trata de Enterobacter bugandensis, una bacteria que ya era conocida por su resistencia a múltiples fármacos en la Tierra, pero que en el entorno espacial parece haber mutado aún más, volviéndose potencialmente peligrosa para los astronautas.

Adaptación extrema en microgravedad

Los estudios realizados por investigadores de la NASA sugieren que las condiciones extremas del espacio, como la microgravedad, la radiación solar y los altos niveles de dióxido de carbono, han impulsado la rápida evolución de esta bacteria.

“Las cepas aisladas de la EEI han mutado y se han vuelto genéticamente y funcionalmente distintas a sus contrapartes terrestres”, afirma la Dra. Kasthuri Venkateswaran, líder del equipo de investigación del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA.

Amenaza para la salud de los astronautas

La principal preocupación radica en la resistencia de la bacteria a los antibióticos comúnmente utilizados para tratar infecciones. Esto significa que si un astronauta contrajera una infección por Enterobacter bugandensis espacial, las opciones de tratamiento serían limitadas, lo que representa un riesgo significativo para su salud.

Incertidumbre sobre su potencial patogénico

Si bien se ha confirmado la presencia y la resistencia de la superbacteria, aún se desconoce si esta representa una amenaza real para la salud de los astronautas. Se están realizando estudios para determinar su potencial patogénico y evaluar el riesgo de contagio.

Medidas de precaución y búsqueda de soluciones

Ante este descubrimiento, se han extremado las medidas de higiene y control de infecciones en la EEI. Los astronautas están siendo monitoreados de cerca y se han implementado protocolos estrictos para el manejo de muestras y residuos biológicos.

En paralelo, la comunidad científica internacional se encuentra trabajando arduamente en la búsqueda de soluciones para combatir esta nueva amenaza. Se están explorando alternativas como el desarrollo de nuevos antibióticos, terapias fágicas y estrategias de control ambiental.

El futuro de la exploración espacial

El hallazgo de Enterobacter bugandensis en la EEI pone de manifiesto los desafíos que la presencia de microorganismos en el espacio representa para la salud de los astronautas y el éxito de las misiones espaciales a largo plazo.

Este evento resalta la necesidad de una mayor inversión en investigación espacial enfocada en la astrobiología, la medicina espacial y el desarrollo de tecnologías para la protección contra patógenos espaciales.

La comprensión y el manejo de estos riesgos serán cruciales para garantizar la seguridad de los futuros exploradores espaciales y el avance de la humanidad en la conquista del cosmos.