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Con el lanzamiento del iPhone 16, Apple ha sorprendido a muchos al reincorporar botones físicos en su dispositivo estrella, poniendo fin a casi diez años de una tendencia en la que priorizaba el diseño simplificado y el minimalismo sobre la funcionalidad física. La presentación oficial del nuevo iPhone zanjó meses de rumores y, aunque la inteligencia artificial será uno de los pilares del dispositivo, su llegada estará acompañada de una actualización que aún no estará disponible de inmediato. No obstante, lo que más ha llamado la atención es el retorno de botones y puertos que Apple había eliminado en modelos anteriores.

Según un informe de PC Gamer, la estrategia de Apple había estado marcada por la eliminación progresiva de botones y puertos en busca de un diseño más limpio. El iPhone 16, sin embargo, pone fin a esa tendencia con la introducción de un botón de acción configurable por el usuario y un botón de control de cámara que imita la experiencia de un obturador físico, lo que otorga a los usuarios más control y personalización en sus dispositivos.

Apple abandona el minimalismo extremo

En el pasado, Apple se destacó por eliminar características físicas, como el puerto para audífonos en el iPhone 7 o el icónico botón de inicio en el iPhone X. Esta filosofía minimalista también se extendió a sus otros dispositivos, como el MacBook Pro, donde la eliminación de puertos fue duramente criticada por los usuarios. Sin embargo, en los últimos años, Apple ha comenzado a revertir esas decisiones, comenzando con la reintroducción de puertos como HDMI, USB-A y ranuras para tarjetas SD en el MacBook Pro.

El iPhone 16 es la última prueba de este cambio de estrategia. Mientras otras marcas, como Tesla, han adoptado un enfoque más radical al eliminar controles físicos y reemplazarlos por interfaces completamente táctiles, Apple ha escuchado a sus usuarios y ha optado por ofrecer una experiencia que combina la tecnología táctil con la funcionalidad de botones físicos. Este cambio busca mejorar la experiencia de uso, permitiendo a los usuarios interactuar con sus dispositivos de manera más intuitiva y directa.

El regreso de botones y puertos en el iPhone 16 refleja una nueva dirección para Apple, en la que la funcionalidad física vuelve a ser protagonista, sin comprometer el diseño elegante que siempre ha caracterizado a la compañía.