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Mark Zuckerberg, CEO de Meta, ha generado preocupación entre los inversores de la compañía debido a sus actividades extracurriculares de alto riesgo, especialmente su pasión por las Artes Marciales Mixtas (MMA).

El interés de Zuckerberg por el jiu-jitsu y su participación en entrenamientos intensivos junto a reconocidos atletas de MMA como Israel Adesanya y Alexander Volkanovski, ha generado consecuencias tanto físicas como económicas. Recientemente, sufrió un desgarro en el ligamento cruzado anterior de la rodilla durante una sesión de entrenamiento, lo que lo dejó fuera de sus funciones empresariales por un tiempo prolongado.

Impacto en Meta

La ausencia de Zuckerberg por lesiones relacionadas con sus actividades deportivas ha llevado a Meta a emitir una advertencia a sus potenciales inversores. La compañía ha señalado que depende en gran medida del desempeño de su personal clave, incluido Zuckerberg. Además, han destacado que las actividades de alto riesgo en las que participa el CEO, como deportes de combate, deportes extremos y aviación recreativa, conllevan el riesgo de lesiones graves e incluso la posibilidad de muerte.

En un comunicado dirigido a los inversores, Meta informó sobre los posibles impactos adversos en sus operaciones en caso de que Zuckerberg no esté disponible por cualquier motivo. La empresa reconoce que la falta prolongada del CEO podría tener consecuencias materiales significativas en el funcionamiento de la compañía.

Respuesta de Zuckerberg

Ante esta advertencia, Zuckerberg respondió con humor utilizando un GIF de su compañero de entrenamiento, Alexander Volkanovski, quien afirmaba que “alto riesgo es igual a alta recompensa”. A pesar de la situación, Zuckerberg parece tomarse con ligereza las preocupaciones sobre el impacto de sus actividades extracurriculares en Meta. Aunque las actividades deportivas de Zuckerberg, como el jiu-jitsu y las MMA, son controladas y supervisadas, su reciente lesión en la rodilla lo ha obligado a tomarse un tiempo de recuperación de nueve meses, lo que ha generado cierta inquietud entre los inversores sobre la estabilidad operativa de Meta en su ausencia.