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La retroalimentación háptica ha revolucionado la industria del videojuego, destacando especialmente con el mando DualSense de la PS5. Esta tecnología ha inspirado innovaciones como el traje háptico para Skyrim, aunque su costo es elevado. Recientemente, se ha desarrollado un nuevo estándar para aplicar esta tecnología a las aplicaciones en red. Según TechSpot, este estándar fue creado por un consorcio internacional liderado por la Universidad Técnica de Múnich y tomó 10 años completarlo.

Ventajas de “Sentir” Internet

Este nuevo estándar incluye tres tipos de codecs para reducir los datos de señales cinestésicas y táctiles, similar a cómo funcionan los codecs de video y audio. Estos codecs permiten comprimir la retroalimentación háptica, reduciendo significativamente los datos necesarios para transmitir estas señales. Anteriormente, se requerían 4,000 paquetes de datos por segundo para la retroalimentación háptica, pero esta nueva tecnología mejora la eficiencia.

Impacto en Diversos Campos

La tecnología háptica tiene el potencial de transformar varios campos. En la telecirugía, por ejemplo, puede hacer que las operaciones sean más precisas y seguras mediante robots controlados a distancia. Además, puede aplicarse en la conducción remota, primeros auxilios avanzados y, por supuesto, en videojuegos y películas, haciendo que estas experiencias sean más inmersivas e interactivas.

Desarrollo y Aplicaciones Futuras

El consorcio internacional que desarrolló este estándar espera que su aplicación se expanda en los próximos años, permitiendo una integración más amplia de la retroalimentación háptica en diversas industrias. Desde la medicina hasta el entretenimiento, la capacidad de “sentir” internet promete cambiar la forma en que interactuamos con la tecnología y el mundo digital.

Este avance subraya la importancia de la colaboración internacional y la innovación tecnológica para mejorar las experiencias sensoriales en la vida cotidiana. Con el tiempo, es probable que veamos una adopción más amplia de esta tecnología, haciendo que las interacciones digitales sean más ricas y envolventes para usuarios de todo el mundo.