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En los últimos años, el delicado equilibrio de nuestro ecosistema ha sido objeto de numerosos debates y preocupaciones. Una de las alarmas más recientes y preocupantes es la drástica disminución de las poblaciones de abejorros en Europa. Estos insectos, más allá de su aparente simplicidad, desempeñan un papel crucial en la polinización, un proceso vital para la reproducción de muchas plantas y, por ende, para la producción de alimentos. Sin embargo, diversos factores, desde el cambio climático hasta la intervención humana directa, están poniendo en peligro su existencia, lo que podría tener repercusiones catastróficas en la cadena alimentaria y en la biodiversidad del continente.

La situación es tan crítica que se estima que más del 75% de las variedades de abejorros podrían verse amenazadas en las próximas décadas. Países emblemáticos del continente, como Bélgica, Francia y Alemania, serán los más afectados. Ante este panorama, es esencial comprender la magnitud del problema, las causas subyacentes y, lo más importante, las posibles soluciones para revertir esta tendencia preocupante.

Principales causas de su declive

El equipo de Guillaume Ghisbain de la Universidad Libre de Bruselas identifica la degradación de los hábitats de los abejorros por actividades humanas y el cambio climático como las principales causas de su declive. Es esencial comprender la trayectoria de estas comunidades de insectos para diseñar esfuerzos de mitigación adecuados.

  1. Polución ambiental: La contaminación del aire y del agua puede afectar directamente a los hábitats de los abejorros. La polución puede alterar la calidad del aire y del agua, lo que a su vez puede afectar la salud de las plantas de las que los abejorros dependen para obtener néctar y polen.
  2. Pesticidas: Estos químicos, utilizados en la agricultura para controlar plagas, pueden ser tóxicos para los abejorros. La exposición a ciertos pesticidas puede afectar la capacidad de los abejorros para forrajear, reproducirse y hasta puede causar la muerte.
  3. Especies invasoras: Estas son especies que no son nativas de una región y que, al establecerse, pueden competir con las especies locales por recursos. En el caso de los abejorros, las especies invasoras pueden competir por el néctar y el polen, o incluso predar directamente sobre los abejorros o sus nidos.
  4. Nuevos patógenos: Al igual que los humanos, los abejorros pueden ser afectados por enfermedades causadas por patógenos (como bacterias, virus y hongos). La introducción de nuevos patógenos en una región puede tener un impacto devastador en las poblaciones locales de abejorros, especialmente si no tienen defensas naturales contra esos patógenos.

El futuro de los abejorros

Según estudios, entre el 38% y el 76% de las especies de abejorros que hoy no se consideran amenazadas verían su nicho ecológico reducido en un 30% entre 2061 y 2080. Las especies adaptadas para vivir en altitudes y climas fríos son las más amenazadas.

Especies amenazadas

Especie Porcentaje de reducción de su hábitat
B. alpinus Hasta 90%
B. flavidus Hasta 90%
B. pyrrhopygus Hasta 90%
B. monticola Entre 65% y 70%
B. pyrenaeus Entre 65% y 70%