Winamp marcó un antes y un después en la forma en la que consumíamos música. Corrían los últimos años de la década de los 90; la música empezaba a digitalizarse, Internet empezó a populizarse en los hogares y el consumo ilícito de contenido multimedia se puso a la orden del día con programas como eMule, KaZaA, LimeWire o AudioGalaxy. Dada la escasa velocidad de las conexiones, las canciones en MP3 eran el principal sujeto de descarga por unos usuarios que ansiaban acceder a la música de forma gratuita. (más…)