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Colaboración especial por Julio Solano

El 9 de enero, The Exit 8, (traducción de 8番出口), la joya indie de KOTAKE CREATE, aterrizó en Xbox Series X/S, ampliando su alcance más allá de PC, donde ya había cosechado éxito con más de 7,000 reseñas positivas en Steam.

Este juego de cuatro dólares, aparentemente simple, esconde una experiencia claustrofóbica y perturbadora que combina espacios liminales con mecánicas ingeniosas. Pero, ¿cumple con las expectativas? Spoiler: Sí.

Hacia la salida 8

The Exit 8 te coloca en un interminable pasillo del metro japonés, donde el objetivo es simple en apariencia: llegar a la salida 8. Sin embargo, la travesía se convierte rápidamente en una prueba de observación y resistencia psicológica, gracias a las cuatro reglas básicas del juego:

  1. No pases por alto ninguna anomalía.
  2. Si encuentras una anomalía, regresa inmediatamente.
  3. Si no encuentras anomalías, no mires atrás.
  4. Sal por la salida 8.

Cada vuelta al pasillo representa un número de salida ascendente, siempre y cuando sigas las reglas al pie de la letra. Un error o una decisión precipitada reinicia tu progreso. Esta mecánica, sencilla en concepto, es el corazón del juego.

La ansiedad como mecánica

Más que un juego de terror, The Exit 8 se siente como un “juego de ansiedad”. El juego carece de sobresaltos o jumpscares y las anomalías van desde lo obvio hasta lo increíblemente sutil, como un cartel mal colocado o un ligero cambio en las baldosas. Este enfoque desafía la percepción del jugador y le obliga a cuestionar todo lo que ve. ¿Los carteles siempre estuvieron en ese orden? ¿Por qué ahora hay un ruido más fuerte? Estas dudas constantes crean un ambiente de tensión palpable.

Cabe mencionar que no estás solo en estos pasillos interminables, en cada vuelta, un hombre con un maletín aparece caminando por el pasillo, mirando su teléfono, una figura que inicialmente parece trivial, hasta que te preguntes: ¿El señor del maletín me está mirando?

Por un lado, este diseño es brillante: refleja la sensación de estar atrapado en un bucle de perfeccionismo, como si el juego “entendiera” la mente de alguien con TOC o ansiedad. Por otro lado, puede ser agotador para los jugadores que buscan una experiencia más relajada o lineal.

Repetición con un propósito

El bucle de The Exit 8 no es solo una mecánica, sino un medio para transmitir su tema principal: la monotonía y las pequeñas rupturas en la rutina. En este sentido, es fascinante. Sin embargo, la repetición también puede convertirse en un arma de doble filo. Aunque las anomalías varían lo suficiente para mantener el interés, la falta de una narrativa más clara o un progreso tangible más allá de los números de salida puede frustrar a algunos jugadores. No hay contexto ni secretos, solo encuentra las anomalías.

El zumbido constante de las luces fluorescentes, los “clics” mecánicos y los cambios sutiles en el audio son clave para la inmersión. Estos elementos potencian la atmósfera opresiva del juego, pero también podrían haber sido explotados más a fondo para enriquecer la experiencia sensorial.

Resumen

The Exit 8 es una obra que sobresale por su capacidad de transformar un pasillo aparentemente banal en un campo de batalla psicológico. La experiencia puede durar de 30 minutos a más de 4 horas dependiendo de tu atención al detalle. Si disfrutas del terror atmosférico y la tensión constante, es una experiencia imprescindible. Para los demás, puede ser una visita interesante, pero breve.

 

Puntuación: 7̸̝̮̗͇̙̝̮͚͔̦̭͖̥̪͙̣̲́͂̏̌̊̓̓̈̇̅̅̏͆̎̑͑̏͜͝͠͠/̷̧̨̧̤̖̪̘͚̳̦͕̤͉̥̻̦͖̭͊̄̓̾͑́͂̆͋͑̀͋̓́̑̚͘͝1̵̙̬̘̋͝0̴̯̯͉͉̻̭͍͓͈̞̄